Tolerancia al Error: la Base de la Innovación

Por Ninoshka Fasce

¿Has notado que las organizaciones buscan cada vez más personas creativas e innovadoras? Los reclutadores buscan gente con la capacidad de pensar fuera de la caja, las contratan y al poco tiempo se siguen quejando de no tener innovadores en la organización.

¿Dónde están esas personas encontradas por los reclutadores que fueron identificados como creativos? Es una pregunta interesante, ¿no crees? ¿Por qué no están siendo tan innovadoras como se esperaba? ¿Están siendo desaprovechados en su trabajo? ¿O es que la organización simplemente no está proporcionando un entorno que fomente la creatividad y la innovación?

Cuando se evalúa los procesos de reclutamiento se identifica que fue un proceso que si logró atraer a personas con las competencias buscadas, pero ¿qué pasa que no son capaces de demostrar dichas competencias en la organización?

Imagina a Isabella, una joven egresada que demostró su capacidad de innovación en una startup. Fue contratada por su experiencia en crear nuevos productos, abrir mercados y rediseñar procesos. Sin embargo, cuando empieza a trabajar en su nueva organización, su entusiasmo se desvanece rápidamente. A pesar de dedicar muchas horas de estudio a sus ideas, su equipo y su jefe la rechazan. Le dicen que no están para ensayos locos y que debe ser más realista.

¿Te suena familiar? ¿Has pasado por situaciones similares en tu trabajo? ¿Qué pasa cuando las ideas innovadoras no son aceptadas o apoyadas en la organización? ¿Cómo puede uno mantener su motivación y seguir aportando al equipo?

En las organizaciones donde no se tolera el error, donde algunos de los miembros evalúan lo que escuchan, lo juzgan, buscan lo negativo, difícilmente se logrará tener colaboradores capaces de aportar por mucho ADN innovador que corra por sus venas.

Sin tolerancia al error no habrá aciertos. 

Es importante que las organizaciones valoren y fomenten la innovación y la creatividad, y que sepan que estas cualidades no vienen sin riesgo. A menudo, las mejores ideas surgen de la experimentación y del error. Por lo tanto, es esencial que los miembros de la organización, especialmente los líderes, aprendan a tolerar los errores y verlos como oportunidades de aprendizaje y no como fracasos. Fomentar la producción de ideas de mejora, de propuestas, aunque no sean las mejores.

La tolerancia al error es un ingrediente clave para el éxito de una organización innovadora y exitosa. Si existe “permiso para equivocarse” entonces los colaboradores empiezan a opinar, a aportar, a proponer. Sin este permiso existe solo miedo a ser criticado, es cuando las personas no se atreven a tomar decisiones, no se atreven a hacerse responsables. Sin el permiso a equivocarse se tiene personas con quizá muchas capacidades pero que se limitan a hacer lo que el jefe dice y nada más.

Las culturas que promueven realmente la innovación, tienen personas seguras de que digan lo que digan no serán juzgados, puede que se acuerde que la idea no era la mejor, y eso no será un problema, en las culturas con seguridad psicológica, las personas dan lo mejor de sí, se permiten pensar sin grilletes.

La tolerancia al error es el cimiento de la seguridad psicológica, ingrediente catalizador de la innovación.

Fomente la producción de nuevas ideas, de propuestas, felicitando la iniciativa, escúchelos para luego analizarlo y si no es viable, ¡felicítelo igual! Gracias por el aporte, sigue poniendo a trabajar tu ingenio.

Si nota que existen miembros del equipo que critican, juzgan, llámelos a conversar a solas y coménteles su interés en fomentar la producción de ideas nuevas y cómo al criticar solo ponemos barreras a la creatividad.

¿Recuerda cuando de pequeño emprendías alguna actividad nueva? Nadie esperaba que resulte a la primera, se felicitaba la iniciativa y se seguía adelante.

Google es un ejemplo de innovación y ¿cómo lo logró? Tolerando el error y permitiendo experimentar, al desarrollar su proyecto Google Glass inicialmente no tuvo mucho éxito y no fue aceptado por el mercado. En lugar de abandonar el proyecto por completo, Google utilizó los errores y fracasos como una oportunidad para aprender y mejorar la tecnología, lo que finalmente llevó a la creación de una nueva y mejorada versión de los anteojos inteligentes.

Los errores son siempre aprendizajes.

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